Steve Lieberman, también conocido como The
Gangsta Rabbi, es uno de los artistas más inclasificables y radicales de la
escena musical underground estadounidense. Nacido en 1958, este
multiinstrumentista judío y autodenominado “Rey del Punk Judío” ha construido
una obra monumental y caótica, con más de 70 discos publicados de forma
independiente, en los que fusiona punk, thrash, música militar, jazz, música
hebrea y noise. Lieberman compone, canta, produce y ejecuta todos los
instrumentos él mismo, incorporando guitarras saturadas, flautas, trombones,
bajos distorsionados y todo lo que pueda aportar tensión y extrañeza a su
visión sonora. Su estilo, definido por él mismo como punk-thrash-brass o
incluso thrash opera, camina deliberadamente por el borde del ruido y el
delirio. Autodeclarado hebreo nazareo y creador de su propia secta religiosa (The
Bad’lanim), es también el responsable de la canción más larga jamás
publicada, con más de 35 horas de duración, lo que le valió un récord Guinness.
Diagnosticado con trastorno bipolar y enfrentando desde hace más de una década
una leucemia progresiva terminal, su música se ha vuelto una forma de
resistencia física y espiritual. Su arte es excesivo, incómodo, y absolutamente
personal. Y entre esos márgenes opera Meet the Gangsta Rabbi (44/82) Opus166.
Este EP de cinco canciones es un perfecto
ejemplo del universo sónico de Lieberman. Lejos de toda convención comercial, la
producción es intencionalmente caótica: aparecen bajos saturados, flautas chirriantes,
percusiones mecánicas y una distorsión omnipresente. Meet the Gangsta Rabbi
(44/82) Opus166 es una manifestación de resistencia en forma de ruido
extremo. Lieberman es outsider por convicción: exige que se lo escuche desde el
margen, donde la distorsión puede ser un lenguaje musical.
Este EP no está hecho para el oyente casual, es
un desafío estético y conceptual, más cerca del arte outsider que del punk
comercial. Si el punk nació para molestar, Steve Lieberman es su profeta más
ruidoso y desquiciado.